El factoring en Perú, busca agilizar el proceso de emisión de facturas tanto para Sunat como para el cliente en un plazo menor. Esto con la finalidad de obtener capital de trabajo de forma inmediata.
Este método ayuda a beneficiar con liquidez inmediata a las micro, pequeñas y medianas empresas que venden bienes o prestan servicios a empresas grandes cuyas facturas tienen un plazo de cobro de hasta 30, 60, 90 o 120 días.
Esta operación de venta de facturas se realiza con la finalidad de obtener el capital suficiente a corto plazo sin tener la necesidad de hacer préstamos para seguir operando. El Ministerio de la Producción tiene un proyecto que estimula el uso del factoring en el país con el fin de facilitar el trabajo de las micro, pequeñas y medianas empresas.
Actualmente a raíz de la Covid-19 el factoring representa menos del 3% del PBI, a diferencia de otros países que la cifra supera los 2 dígitos. El reto de esta nueva etapa es difundir la importancia de este servicio a las pequeñas y medianas empresas, aún ahora por falta de conocimiento muchos empresarios continúan en deudas con entidades bancarias sin saber que sus propias facturas pueden proporcionarles el financiamiento que necesitan.
A continuación, te presentamos las 5 ventajas de implementar el factoring en tu negocio:
- Adiós deudas:
Esta modalidad de financiamiento no es un préstamo, por lo tanto, no es considerado deuda dentro del sistema financiero, esto beneficia al empresario ya que no correrá el riesgo de ingresar a las centrales de riesgo por falta de pago.
- Tasa de interés atractiva:
Usualmente las MYPES al realizar un préstamo de entidades financieras obtienen intereses de entre el 6% al 14% de acuerdo a su evaluación. Si ejecuta el servicio de factoring en su empresa, las tasas de interés van de 1% a 2.25% mensual, lo cual la vuelve no solo atractiva sino también rentable.
- Cero trámites:
El factoring así como otros procesos importantes en plena pandemia ha evolucionado a la era digital, evitando así el traspaso de papeleo, documentos y demás; lo cual ocasionaba tedio y confusión para quien lo realizaba, además de que el plazo del proceso era mucho más dilatado.
- Menos carga operativa:
Cobrar facturas y hacer el monitoreo de esos pagos a menudo es engorroso. La implementación del factoring resta esta carga, ya que será ahora la empresa a quien se otorgó la factura la que esté pendiente del pago de la misma.
- Genera un buen flujo de ingresos:
La última y una de las más importantes es que el factoring brinda la oportunidad de adelantar pagos de las facturas pendientes, esto conlleva a tener la liquidez suficiente para que la empresa siga invirtiendo y no pare de producir y/o brindar su servicio.
Usualmente los pagos de las facturas se realizan en plazos de 30, 60 o 90 días, bajo esta modalidad los pagos operativos, administrativos y demás no dejarán de realizarse.
La norma que esclarece los detalles del factoring fue promulgada en el año 2020, desde entonces solo el 2% de las facturas pendientes a nivel nacional han sido negociadas bajo esa modalidad de financiamiento, hay un largo camino por recorrer, si tienes una empresa infórmate más a cerca del factoring y evita que tu negocio pare por falta de solvencia.